En los momentos en que nuestro bebé está congestionado, podemos llevar a cabo una limpieza nasal.
Consejos para hacer limpieza nasal a los pequeños:
1 – Intentarlo cuando el bebé esté tranquilo.
2 – Ponerle una toalla en el cuello.
3 – Tumbar al bebé, preferiblemente de lado, con una mejilla apoyada en el cambiador y sujetando bien su cabecita.
4 – Sujetar al bebe.
5 – Introducir el suero en la nariz.
6 – Pasados unos 15-20 segundos, se debe incorporar al niño para que expulse las mucosidades.
7 – Para expulsar los mocos que aún queden en sus fosas nasales, hay que utilizar una aspirador nasal.
Para ello, se debe volver a tumbar al niño, colocar la boquilla en uno de los orificios nasales y el otro extremo en la boca de la mamá.
Se debe aspirar de forma suave y regular, repitiendo la operación en el otro orificio.
Para finalizar, retirar el recambio y desecharlo.
2 – CUIDADOS BEBÉS
LIMPIADOR DE OÍDOS
La cera es una sustancia protectora, pero en exceso ocasiona tapones que son muy molestos para los bebés.
Por esta razón, es conveniente aprender a limpiar el oído de los niños, tarea que no es muy complicada.
Es poco probable que los bebés tengan los oídos sucios, con lo cual, una limpieza superficial será suficiente. Hacer una obsesión de ello, puede afectar a su salud.
En ningún caso se debe introducir ningún tipo de objeto en el interior del oído.
En el caso de considerar que hay mucha cera en el oído, se debe consultar con un pedíatra que considerará si hay un tapón.
El peligro de dañar el tímpano es elevado. Al tratarse de un conducto muy fino en los niños, introducir objetos en el oído puede provocar desescamación en la piel.
3 – CUIDADOS BEBÉS
MORDEDORES
Los indicios más comunes de la cercana etapa de la dentición son los siguientes:
Las encías de la boca están de un color más rojizo que el habitual.
Babea mucho más de lo habitual.
Se muestra mucho más inquieto y llora aunque le hayamos dado de comer.
Se despierta más a menudo cuando está dormido.
Tiende a quitarse el chupete y se introduce las manos dentro de la boca.
Agarra cualquier objeto que encuentre a su alcance y lo mordisquea.
Resumiento, el principal beneficio de un mordedor es que sirve como calmante y de esta forma evitamos que el bebé utilice cualquier otro objeto no apropiado para ello.